Los investigadores del MIT están desarrollando un parche adhesivo que puede permanecer en la ubicación de un tumor, proporcionando una combinación de terapia farmacológica, terapia genética y fototerapia mediante nanoesferas y nanobarras especialmente diseñadas, que aquí se ven atacando una célula tumoral. (Imagen: Ella Maru)
Un parche capaz de administrar terapia farmacológica, terapia genética y fototerapia, directamente a los tumores, ha mostrado resultados prometedores. En ratones, el dispositivo destruyó tumores colorrectales e impidió su rebrote después de la cirugía.
Según algunas estimaciones, aproximadamente una de cada 20 personas desarrollará cáncer colorrectal durante su vida, lo que lo convierte en una de las formas más comunes de cáncer.
La primera línea de tratamiento más ampliamente utilizada es la cirugía, pero esto puede suponer una eliminación incompleta del tumor. Pueden quedar células cancerosas, lo que potencialmente podría llevar a una reaparición y a un mayor riesgo de metástasis. Efectivamente, si bien muchos pacientes quedan libres de cáncer durante meses o incluso años después de la operación, se sabe que los tumores vuelven a aparecer en hasta el 50 por ciento de los casos.
Las terapias convencionales utilizadas para evitar que los tumores vuelvan a salir después de la cirugía no diferencian lo bastante entre células sanas y cancerosas, lo que lleva a efectos secundarios graves.
El equipo de Natalie Artzi, del Instituto de Ciencia e Ingeniería Médicas (IMES, por sus siglas en inglés) dependiente del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), en Estados Unidos, ha ideado un parche adhesivo que puede adherirse al lugar del tumor, ya sea antes o después de la operación, para suministrar una triple combinación de tratamientos: terapia genética, terapia farmacológica y fototerapia (basada en luz).
La liberación de esta triple combinación de terapias de forma local, justo en el punto del tumor, puede incrementar de manera notable la eficiencia del tratamiento.
Fuente:
NCYT Amazings
